La digestión es un proceso de combustión de sólidos o líquidos para extraer sus unidades de calor, que darán energía para el movimiento, y sus componentes químicos que reemplezarán las partículas desgastadas de los tejidos corporales. La combustión es una unión química rápida de luz y calor; sus productos residuales son dióxido de carbono y agua (humedad). El proceso de combustión es similar en un motor y en nuestro sistema digestivo, y esta comparación resulta muy útil.
El combustible debe ser adecuado para el tipo de motor y par la cámara de combustión es similar a un motor y para la cámara de combustión, tanto si trata de un motor de vapor como de uno como de gasolina. Éste es un punto importante a la hora de generar salud y de mantenerla. Incluso un hombre tan rico como John D. Rockefeller, que tuvo problemas digestivos toda su vida, consiguió llegar a una edad avanzada seleccionando cuidadosamente y comiendo alimentos simples y ligeros. El noble italiano Cornario demostró este mismo punto. Alcanzó los 110 años porque vivió una vida simple después de que los médicos le dijeron que sus hábitos imprudentes le llevarían a morir joven.
Pensar y prestar un poco de atención a nuestro motor, a las proporciones y cualidades de su combustible, nos ahorrará muchos problemas de salud y sufrimientos. La conservación de nuestro cuerpo depende del proceso de digestión, tal como le ocurre a un motor. En esta analogía sólo hay una excepción: el cuerpo es una máquina que se autorepara, y él las emociones y la mente son refinadas bujías energéticas que activan la ambición y todo tipo de sentimientos, así como los impulsos sensorios y motores. La regulación de las bujías está en manos de aquellos de nosotros que deseamos afinar el motor en lugar de depender de una píldora como pobre sustituto del esfuerzo personal y del entendimiento aplicado a uno mismo. Nuestra mente siempre quiere escapar, en lugar de afrontar el problema y resolverlo mediante un esfuerzo concentrado y continuo.
Randolph Stone
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Hoy sabemos, gracias a la Medicina Tradicional Oriental, que la enfermedad es el resultado de inhibiciones específicas en el flujo energético. La Salud no es algo que atañe exclusivamente al cuerpo. Es la expresión natural de cuerpo, la mente y el alma cuando siguen el ritmo de la Vida. La Verdadera Salud es la armonía de la vida en nosotros, que se expresa como paz mental, felicidad y bienestar. No es exclusivamente una cuestión de forma física, sino el resultado directo de la libre expresión del alma a través de la mente y el cuerpo del individuo.
Si realmente queremos salud, debemos estar dispuestos a trabajar por ella, debemos aprender a gobernar y dirigir nuestra energía. Para ello podemos valernos de herramientas poderosísimas como la meditación, el Chi Kung, una alimentación completa y equilibrada que, además de nutrir al cuerpo, reduzca las tensiones emocionales y mentales, basada en verduras, frutas, frutos secos, semillas, leguminosas y cereales apoyada con complementos alimenticios específicos, así como con las lecciones de Un Curso de Milagros que nos ayudan a corregir viejos patrones de pensamiento.
Lo que hacemos durante la consulta es una evaluación del estado actual y con base en esto, establecemos en conjunto las metas a alcanzar y se propone el programa a seguir. Agenda tu cita!
Alejandra Martínez (Whatsapp: 55 2300 37 94 en la Cd. de México)
“Solo es la energía que está en la materia la que hace que la materia parezca estar viva. Cuando esta energía escapa, sólo queda el cascarón… La cura consiste en contactar con la corriente de vida interna y restablecer el libre flujo de su energía”.
El sueño feliz 